Energía generada a partir de la radiación solar que se almacena en depósitos de agua para aprovechar el calor del sol. Habitualmente se emplea a nivel doméstico para calentar fluidos, y a nivel industrial para la producción de electricidad a través de turbinas. La energía solar térmica de media temperatura (colectores cilindro-parabólicos) y la de alta temperatura (torres de concentración y heliostatos), produce electricidad, y España ha sido pionera en ello. Los tres tipos (baja, media y alta temperatura), conforman la energía solar térmica.